Jesús, el hombre que ama como Dios
Vivir hoy la condición humana al estilo de Jesús.
Si analizamos con claridad y realismo lo más esencial de nuestra condición humana, sus luces y sus sombras, veremos que ella misma nos hace capaces de lo mejor y también de lo peor, de ser muy humanos o inhumanos. Y descubriremos que la felicidad o la desdicha en la vida dependen de la calidad de nuestras relaciones interpersonales, del amor…